El pasado 11 de mayo fui por primera vez al Día Internacional del Longboard que se celebró en Madrid con un cruising muy majo. Cientos de personas bajaban desde Plaza de Castilla al Parque del Oeste patinando. La policía, no sé si con petición expresa o sin ella, ayudó a los longboarders parando el tráfico y escoltándonos. Así mismo, la gente que nos veía pasar nos daba ánimos o le daba al cláxon. Si alguien nos vio como delincuentes no lo dijo en voz alta.
El domingo pasado también se celebró un cruising pidiendo que se tomase el longboard como deporte. Lo llamaron "Cruising cup of café con leche" para hacerlo divertido. Yo diría que vino más gente a este que al Día Internacional. Pero en este no intervino la policía. Consecuencias: cogimos toda la carretera, los coches iban lentos detrás nuestro. Pero de la misma manera nadie hizo ningún comentario despectivo, de hecho muchos grababan desde las aceras y en particular un señor mayor dijo: "Ánimo, con valentía pero con cuidado, chavales."
En cambio, los skater hacen un cruising parecido para decir que no son delincuentes sino chavales haciendo deporte. Lo llaman "Baja la cabra" y casi todos los años acaba mal. Este año, la policía fue a apalearlos, tanto mayores de edad como a niños de 13 años.
¿Por qué defienden a unos y atacan a otros? ¿Qué diferencia verán entre un tablón de madera más o menos largo y cuatro ruedas? Pido que la sociedad vea a los skaters igual que a los longboarders. De hecho muchos skaters aparecen en cruisings de longboard.
Igualdad ante todo. Es un deporte no un crimen.
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